martes, 23 de junio de 2009

Prácticas vs Políticas

Si bien sabemos que en estos últimos tiempos en el Instituto “Modelo” se han registrados pocos cambios positivos, cierto tipo de situaciones negativas siguen existiendo y todavía falta mucho por hacer.
En cuanto al personal penitenciario hay muchos que quieren hacer bien las cosas, sabemos que se tienen que enfrentar a la verticalidad y el autoritarismo arcaico y ya rancio de la institución.
Ciertos jerarcas de rango mayores que no están de acuerdo; ni con la política de diálogo, y mucho menos con la conducción civil de la Unidad, medidas que se tendrán que extender a las demás unidades de la provincia de Santa Fe dada las conocidas carencias que registra las planas mayor del Servicio Penitenciario.
Si sólo observamos el estado de las cárceles santafesinas, sobran las palabras. En estos casos no sólo demuestran una elevada ineptitud para cubrir los cargos que ocupan sino que también se acoplan a la ley del menor esfuerzo. Con esto desgastan toda energía positiva.
Es tiempo que en la institución de una vez por todas se pongan a pensar y decidan implementar programas de contención orientados a los sectores más postergados y vulnerables de la unidad.
Si muchas veces se registran situaciones de violencia es fácil culpar a los pibes y decir que todos son “bardos” y que “viven haciendo macanas”.
Por esto decimos que hay que pensar qué hacemos, qué les enseñamos, o a dónde estamos cuando más lo necesitan.

lunes, 15 de junio de 2009

Desafío

por Osvaldo Daniel Guzmán

El trabajo en este espacio nos lleva a un constante desafío. Desafío, porque la mayoría de los internos aquí tenemos una escasa escuela primaria, los que la tienen. Cuando empezamos a pensar este proyecto surgieron temas abarcadores, como la pobreza, la miseria y la falta de educación.
Uno de nuestros objetivos es mostrar a la sociedad que aunque estamos detenidos y padeciendo estas situaciones, seguimos luchando. Es sabido que en la vida libre, algunos de los que hoy están privados de libertad tuvieron que delinquir para darles de comer a su familia. Sólo hay que tener en cuenta que no son ellos los culpables de haber cometido tal error, fueron los fabricantes de pobreza que a su vez son los que la criminalizan y castigan. Actualmente, en todas cárceles del país se encuentran privados de su libertad jóvenes que en realidad no deberían estarlo. Ocurre que en la mayoría de los casos fueron empujados a cometer delitos para poder llevar el pan de cada día a sus casas, sabiendo que los hijos de los pobres también tienen que alimentarse, las grandes empresas los han dejado sin trabajo.
Dentro de los lugares de detención se puede ver a diario que todos los internos tenemos la posibilidad de desempeñarlos en una profesión digna. Lo que sucede es que las mismas personas que pueden encontrar un trabajo digno dentro de la cárcel, han sido rechazadas cuando han ido a pedirlo estando en libertad. Creo que los gobiernos de las últimas décadas tienen la culpa por haber creado grandes monopolismos, en los cuales se ocupa el mínimo de mano de obra laboral. Estos son los responsables de que este país esté plagado de pobres e indigentes.
Hoy nos asustamos (porque a diario son noticias) de los chicos en condiciones de calle, y son muy pocos los que hacen algo por ellos, sabiendo que son el futuro de nuestro país y que de acuerdo a la educación que tengan, van a poder insertarse en el mercado laboral, e insertar a sus hijos, y los hijos de sus hijos. ¿Qué pretendemos? ¿Crear mas analfabetismo para volver a la época de la esclavitud (que existe pero de forma encubierta)?. ¿Queremos crear cárceles en vez de escuelas? Saquémonos las vendas de los ojos y elijamos dirigentes con proyectos para que el día de mañana la juventud –sus hijos o el mío- tenga un trabajo digno y no tenga que sufrir el encierro a causa de haber cometido un error. Fijémonos lo que queremos para nuestros hijos, porque hoy por hoy, nadie se encuentra exento de pasar por esto…

jueves, 11 de junio de 2009

Poliladron

ROBOS E INTERNAS POLÍTICAS DE ELECCIONES DENTRO DEL SERIVICIO PENITENCIARIO.

La última denuncia publicada e el diario “La Capital” de Rosario sobre la “misteriosa desaparición del equipamiento de la cárcel de Piñero deja al descubierto la corrupción de los agentes de “seguridad” del Servicio Penitenciario.
El equipamiento, valuado en unos $100.000, no puede ser nunca sacado del establecimiento por algún interno sin una previa autorización de un ALCAIDE MAYOR responsable del mismo y se cae de maduro que tampoco se le otorgaría dicha autorización, ya que se trata de sacar elementos destinados por el gobierno de la provincia para el acondicionamiento y la seguridad del módulo nuevo que se esta haciendo en la cárcel. Así que desenmascara el accionar de los agentes ecargados de mantener la paz dentro de los penales de la provincia.
Aquí, en la cárcel de Coronda, venimos sufriendo los mismos hechos, como ya lo habíamos denunciado antes por este medio con el robo del CPU de esta sala, junto con otros tantos elementos de electrónica pertenecientes a las asistentes, terapistas y psicólogas del Organismo Técnico Criminológico, destinado a “resocializar y reinsertar” a los detenidos. La modalidad fue exactamente la misma que en la cárcel de Piñero, desaparecieron las cosas “como por arte de magia”. Al menos esa fue la respuesta que obtuvimos cuando hicimos el reclamo del CPU ante el director de la unidad, CPU que contenía valiosa información para la próxima edición de la revista “Ciudad Interna”, cuya edición iba a salir este mes, pero con este inconveniente tuvimos que retrasarla.
Eso no es todo, el Secretario de Asuntos Penitenciarios, Leandro Corti, personalmente quiso “calmar la situación” tratando de comprarnos con la promesa política de que nos iban a “donar” un CPU ni bien terminen las elecciones de fin de mes y así dejar todo en la nada. Aclaramos nuevamente para que no se olviden que ese CPU que nosotros reclamamos no fue donado ni nada por el estilo, sino que lo compramos con parte de plata de la venta de la revista con la ayuda de las Diputadas Lic. Alicia Gutierrez y Mónica Peralta y lo que importa aquí no es el CPU en sí, sino la información que contenía dentro.
Nosotros venimos diciendo ya hace bastante tiempo que estas situaciones justo en época de elecciones suelen generarse por internas políticas para desestabilizar este sistema y pueden generar agravantes dentro de todo el Servicio Penitenciario en general. Lo más llamativo de todo esto es que dentro de las instituciones penitenciarias como lo son estas y de este modo, se generen internas políticas que generan muertes y motines aquí dentro, y caen mal al resto de la población.
Desde esta redacción tratamos de informar de los sucesos acontecidos recientemente aquí dentro para que la sociedad tome conciencia de que los encargados de cuidar que no les roben y de velar por la paz de los presos, son los que más roban y los que buscan la reacción de los internos para que situaciones como estas deriven en motines, de los cuales los únicos favorecidos son ellos ya que pasan presupuestos millonarios que exceden el monto real hasta en un triple. Por lo demás, la realidad y los hechos hablan por si solos.

Sin pelotas

por Osvaldo D. Guzmán


En el espacio de Ciudad Interna, se han realizado, a lo largo del tiempo distintos proyectos, muchos se llevaron a cabo, otros no y algunos están a la espera de una respuesta.
Dos años atrás, aproximadamente, se presentó ante las autoridades un micro emprendimiento de un taller de pelotas, esperando el aval por parte del Servicio Penitenciario, sabiendo que el mismo tendría que conseguir las cosas necesarias para poder realizarlo.
Dedicamos mucho tiempo en tratar de conseguir una máquina para este fin, no encontramos buena disposición para adquirirla, aduciendo que significaba mucho dinero. Como no queríamos que esta iniciativa quedara en la nada, continuamos recorriendo otros caminos y nos encontramos con la colaboración de la Pastoral Penitenciaria, que nos facilitó una máquina adecuada para la fabricación de pelotas, en forma de comodato, acordando con ellos las condiciones de su uso.
Sin embargo, continuamos encontrándonos con la negativa predisposición del Servicio Penitenciario, palabras van, palabras vienen, en las mesas de diálogo, pero hace aproximadamente ochos meses que contamos con la máquina apropiada sin poder ponerla en funcionamiento.
Somos concientes que llevar adelante un proyecto como este que apunta a uno de los pilares fundamentales que debe tener la institución, como lo es la creación de trabajo dentro y fuera de la misma, desde y para el detenido, las malas disposiciones nunca faltan.
Vemos constantemente que el progreso de las personas detenidas se esta obstaculizado por el mismo Sistema Penitenciario, quienes deberían promocionarlo. Es evidente que no quieren estos cambios positivos y no cambian, no colaboran y tampoco dejan colaborar.
Después que el Dr. Leandro Corti, Secretario de Asuntos Penitenciarios, estuviera en la sala de informática Ciudad Interna, donde se planteó el mencionado tema, su respuesta fue que lo tendríamos que dialogar con los directores de la unidad. Realizar el proyecto se llevo mucho tiempo, también se dedicó tiempo en las mesas de diálogo, hemos planteado numerosas veces esta inquietud. Da la impresión de que estos funcionarios se parecen a jugadores de fútbol que en lugar de ir hacia delante, dejan correr el tiempo tirándose la pelota unos a otros,No obstante, seguiremos insistiendo para que esto empiece a funcionar, tarde o temprano, sabiendo que proporcionará una fuente laboral para los detenidos como así un porcentaje más alto de los sueldo que paga la empresa IAPIP.

sábado, 6 de junio de 2009

Política de vanguardia penitenciaria

El gobierno tendría que reafirmar su compromiso con la sociedad y debería realizar en este sentido una apuesta firme tanto en el aspecto edilicio y en la capacitación del personal e internos por un lado, como en la legislación por otro. Esto, debería realizarse con un escenario en el cual la educación y el trabajo sean los pilares fundamentales del sistema. Para ellos, se debería diseñar un plan de acción cuya finalidad sea restituir al hombre a la sociedad en condiciones tales que no vuelva a delinquir, y de esa forma disminuir la reincidencia.
Sería, de suma importancia que se dé continuidad a lo largo de los gobiernos provinciales que se van sucediendo, apuntando a todas las unidades de la provincia. Siempre se tendrá que corregir situaciones, indistintamente de los funcionarios de turno.

Para esto se tendrá que articular acciones con el medio externo abriéndose las la participación a ONG e instituciones interesadas en colaborar con la reinserción y que estén orientadas al respecto de los derechos humanos de los detenidos. Sin una acción enérgica de todas las entendidas no será posible alcanzar este objetivo. Por lo tanto, la prevención y la atención post penitenciaria son indispensable. Así, economía y seguridad son dos términos que resultan indispensables de definir y a partir de los cuales se deben orientar las acciones según el concepto asignado. Entendemos que quien delinque es el emergente social por lo que se debe resolver cuestiones macro sociales y económicas pendientes.
En materia legislativa, se tiene que reglamentar el régimen para la persona privada de su libertad: régimen de comunicación, régimen de progresividad y programas de prelibertad, régimen de prisión domiciliaria y un nuevo rol de instituto de asistencia a presos y liberados. La creación de un ente cooperador como medio para canalizar programas de aprendizaje de oficios y medio de sustentación.
Es fundamental una nueva política penitenciaria, la implementación de un plan estratégico que comprenda este aspecto paradójico en que hoy se encuentra el Sistema Penitenciario en donde todos sabemos que no cumple su finalidad, que está determinada en la ley, y de este modo, no puede pretender corregir a quienes se les ha confiado por no cumplir con la ley.

viernes, 5 de junio de 2009

¿Cómo se conducen las cárceles?

Por Osvaldo Daniel Guzmán

Hace muchos años que observamos al frente de esta Unidad Penitenciaria, la más grande de Santa Fe, como también de los restantes centros de detención, a personas con clara inclinación a la represión. Estas personas no aceptan modificaciones, actualización, ni siquiera buscan su propia capacitación. Esto, sumado a los directores y oficiales que no escuchan a los detenidos, multiplica las condiciones infrahumana de las cárceles .
Al asumirla intervención de la cárcel corondina, la gravedad de la crisis alcanzó su pico máximo en llevar una política de encierro. Las autoridades provinciales tienen conocimiento pero no reaccionan a tiempo, favoreciendo así a la acción que no aceptan cambios y modificaciones en el sistema.
Tarea difícil, dado que no falta personal dispuesto a boicotear todo esfuerzo por mejorar la calidad de vida del lugar, así como los avances en cuestiones de derechos humanos, trabajo educación, limites en los abusos de poder y corrupción de las anteriores autoridades.
Sólo un civil con respaldo político conocedor del paño y bolas bien puestas puede intentar el saneamiento, la diversidad de criterio y la materialización de las múltiples ideas generadas por personal e internos que desean progresar, para futuro beneficio de toda la sociedad.
Con los cambios producidos en la intervención, se demuestra que al frente de cada unidad penitenciaria debe trabajar persona civil, acompañados de oficiales subordinados a ellos.
Falta mucho para alcanzar el ideal requerido para que un centro de detención cumpla su verdadera función, pero se vislumbra poco a poco el crecimiento del nivel de vida, posibilidades de los detenidos y lo más importante: el sometimiento de las fuerzas de seguridad al poder político y a las leyes que regulan la actividad, que disponen que se extremen los esfuerzos readaptar a quien trasgreden las leyes, no para castigarlos, y menos para matarlos -directa o indirecta mente-, como se estilaba.
Diálogo, ideas y creación de proyectos, son logros reconocibles conseguidos en pocos meses, bien decimos que la corrupción no terminó, existe todavía personal dispuesto a poner traba, por acción u omisión de su deberes, sutileza que observamos diario.
El saneamiento debe alcanzar a todos los escalafones. La diversidad de ideas como aliciente y solución, no como motivo de pelea. Y la materialización de esas ideas, no interesa de donde provengan mientras sean positivas y a corto plazo.
Al fin y al cabo, más de veinte años de gobierno no civil muestra bien claro el resultado, las palabras sobran acerca del estado del Servicio Penitenciario provincial y sus cuadros, inclusive los inferiores…