lunes, 23 de agosto de 2010


Desde la asunción del gobierno “Socialista”, en la provincia de Santa Fe, uno de sus objetivos primordiales fue intentar la captación de militantes sociales, cuadros que conocieran bien las estrategias de los movimientos populares, con el fin de ampliar aun más los tentáculos del poder, y así controlar con mayor facilidad a las masas.

Esta táctica fue puesta en práctica por quien ocupa el cargo de Secretario de Asuntos Penitenciarios, el Dr. Leandro Corti, en algunos casos, este jodido funcionario, realizo su propósito con la clara intención de usar a quien fueron una vez luchadores sociales, para contrarrestar y controlar la resistencia de las distintas organizaciones que se van gestando en el campo popular.

El primero en dejarse atrapar por esta perversa telaraña fue, Antonio Tesolini, quien milito por años en un organismo civil de derechos humanos de la Ciudad de Rosario, el cual esta abocado al trabajo carcelario.

En la actualidad, Tesolini, encubiertamente es asesor de Corti, y bajo el ala de la viceministra de Salud, Dra. Débora Ferrandini, ocupa un importante cargo dentro del ministerio de salud orientado al trabajo dentro del IRAR, y otros lugares de encierro. Solamente teniendo en cuanta los múltiples casos de TBC mal entendidos, que en muchos casos derivaron en la muerte de los pibes, sobran las palabras para describir la pésima actuación de Tesolini.

Recordamos que el accionar del ministerio de salud, es nulo dentro los penales santafecinos, motivo por el cual ha sido el causante de la mayor cantidad de muertes registradas en los últimos tiempos en las cárceles de la región.

Esta actitud de Tesolini, genero un gran malestar en varios organismos civiles. Dentro de la unidad “Modelo” la indignación fue tan grade que lo menos que le dijeron los pibes fue, TRAIDOR HISTORICO, cuando apareció como funcionario de estado…jamás regreso.

Al igual que el caso de Tesolini, otro de los reclutamientos de Corti fue el de, Amanda Martínez, quien militaba en Ciudad Interna, motivo por el cual la bronca fue aun mayor, puesto que somos un movimiento apartidario.
Ni bien aprecio Amanda con la noticia de que desempeñaría un cargo estatal dentro del área de Salud Mental, los compañeros la invitaron a que se retirara inmediatamente del espacio y no aparecería nunca más, pero…

Puesto que muchos de los compas que sabían de estas artimañas del poder fueron recuperando su libertad, o trasladado a otras unidad, las autoridades pensaron que la cosa de diluyo en el olvido.

Es así pues, que los funcionarios decidieron activar nuevamente su mecanismo de espionaje y desarticulación. Con mayor razón luego de que se unió toda la cárcel en demanda de justos derechos.
Para esto mandaron nuevamente a la carga, a Amanda Martines, quien en la actualidad recorrer los pasillos de ambas alas de la unidad, infiltrándose entre los pibes, ofreciendo diversos beneficios, y para ser más creíble, nada mejor que tratar de hacerles creer que anda mal, con los mismos que le dan ordenes, y a quienes les reporta la información que rescata.

Desde Ciudad Interna, luego de mucho reflexionar sobres esto casos, ya no creemos que estos personajes se cagaron y tranzaron convicciones sostenidas durante años, ni tanpoco que son principiantes de de traidores. Ahora empezamos a pensar que siempre lo fueron, solo que no avían tenido la oportunidad que les brindo Leandro Corti de manifestarse.

Es por ello, que también creemos que hay que desenmascararlos, nada tienen de progresistas, puesto que con sus actitudes retrogradas lo único que hacen es ser serviles al poder, recabando y brindándole información para que ejerza un mejor control de la situación, y desarticule los movimientos colectivos en demanda de justos reclamos.

De esta forma son cómplices directos de una sutil, pero efectiva represión ejercida por los actúales funcionarios de gobierno, quienes con solo ver el estado al que han llevado las cárceles de la región, sobran las palabras.