Por: Lisandro Arostegui
Esta es otra historia no oficial que la cuenta un compañero que vivió una experiencia muy mala dentro del lugar donde el Estado lo ha puesto para “rehabilitarse” y poder “reinsertarse en la sociedad”.-
El mismo se encontraba en el pabellón 12 y una tarde por orden que jamás se supo de quien emanó, fue sacado del pabellón con la excusa (gran falacia como tantas de las que suceden aquí adentro) de que habían informado que le había pegado a un celador del pabellón con un palo. Está comprobado que era mentira, y el compañero supo, una vez más, que esto no olía bien, que vendrían seguramente los malos tratos de siempre. Y así fue: lo trasladaron al pabellón de disciplina (buzones).
Allí estaba, era el tercer día de su estadía en ese sucio lugar, en condiciones inhumanas – condiciones que no detallaremos en este breve relato, ya que son de público y notorio conocimiento– sin tener ningún tipo de pertenencia, cuando un celador le advirtió a los del grupo GEOP que el compañero tenia una chusa (arma blanca) en su poder. Otra mentira: en esos lugares no podes tener nada de nada. Inmediatamente lo sacaron de la celda y lo agredieron físicamente, también le tiraban pimienta para que no vea quien le pegaba, mientras tanto, para no perder la oportunidad, el celador del lugar aprovechaba para robarle una campera (por la cual ya le había ofrecido droga) y otras pertenencias.
Por si fuera poco, después de estos maltratos físicos y psíquicos lo metieron en una celda sin nada y totalmente desnudo. Con el pasa plato cerrado reclamaba por sus pertenencias. Tuvo que hacer la ahorcadita (intento de ahorcamiento) para que se acerque el celador y abra el pasa plato. Cuando logró su objetivo: que abrieran el pasa plato, puso su brazo a través del mismo para que no se lo cerraran. Es así, que recibía golpes en la mano y agarrándole el brazo (que lo tenia cortado por otros reclamos anteriores) con un palo le pegaban en los cortes.
En fin queremos decir que el mismo celador de ese día hoy se encuentra trabajando como si nada y haciendo de las suyas, ya que las denuncias hacia el, nunca fueron presentadas ante un juzgado.-
En esos mismos buzones, de los cuales, pese a estos tratos degradantes y a esta violencia ejercida sobre nosotros, pudimos salir con vida para hoy contarlo y denunciarlo, se produjo el lamentable episodio hace un par de días, por el cual hoy Lucas, está peleando por su vida. Un pibe de 19 años que había llegado a “La Modelo” hacía tres meses y que también fue conducido a los buzones, y que lamentablemente salió en grave estado los mismos, por razones que no están esclarecidas pero en las que se incluyen mínimamente una “no acción” del personal responsable.-