miércoles, 11 de julio de 2007

PUEBLO NO REDUCIDO

Desde Ciudad Interna valoramos y alentamos a nuestros compañeros, tanto del Ala norte como la del sur a seguir adelante con sus iniciativas educativas.
Luego de haber leído el tercer número de nuestra revista, por que a pesar de estar divididos en ala norte y sur por conveniencia carcelaria, no dejamos de ser internos de la misma unidad. Por lo tanto de este lado también la adoptamos como propia, ya que padecemos las mismas penurias allí reflejadas.
De mi parte, desde que ingresé, hace más de cinco años, siempre miré el lado positivo de las cosas. Nunca dejé que lo malo o nefasto haga mellas en mí, siempre busque superarme, tratando por todos los medios de poner mi granito de arena para ayudar a mis semejantes.
Últimamente junto a dos compañeros, hemos iniciado y logrado obtener un espacio donde comenzamos a dar los primeros pasos de capacitación en informática. Tuvimos que poner mucho esfuerzo, pero valió la pena, esto quiere decir que con empeño y lucha las cosas se consiguen.
Por eso, a través del espacio que me brindan quiero manifestar a toda la población del penal lo siguiente: No olvidemos que somos internos, Ni del sur, ni del norte. Sólo hay una puerta al frente que no diferencia de donde somos, es la que tenemos que ganar conjuntamente, donde nos espera la tan ansiada libertad.
Esa tiene que ser nuestra única meta y lo podemos lograr, el fiel reflejo son los testimonios de aquellos que ya la alcanzaron, todo es posible, pero depende exclusivamente de nosotros.
Las posibilidades están, debemos trabajar conjuntamente para obtener todos los derechos que nos corresponden. Así que por estos lares también pueden contar con nosotros para la lucha de cumplir los objetivos mencionados.
Quisiera hacer infinidad de comentarios pero sólo como no va a ser la última vez, les dejo una frase anónima.
"La educación es la vacuna contra la violencia"•