Desde la unidad tres de Rosario no llegan las palabras de Marcelo Ifran, un compañero que intenta cambiar de vida pero siente una gran incertidumbre porque en sus largos años de encierro no lo capacitaron para regresar al medio libre.
De esta forma comienza con su relato: “Hola me llamo Marcelo Ifran, tengo 44 años y 15 años de mi vida los pase en la cárcel. Reconozco que me equivoque pero también soy consciente que el estado no hace absolutamente nada por impedirlo”, y sostiene con amplio conocimiento de causa. “En todo ese tiempo recorrí casi todas las unidades de la provincia y en ninguna fui capacitado como para no regresar a la cárcel”.
Dentro de un tiempo Marcelo recuperara nuevamente su la libertad y al respecto nos dice: “Mis expectativas de salir me producen muchas incertidumbres, tal es así que no sé lo que voy hacer, quiero cambiar el modo de vida que me llevo a vivir en estos lugares de encierro, que lo único que hacen es prepararte para regresar a ellos. Hoy tengo 5 hijos, una esposa, y puedo comprender que puedo vivir de otra manera, pero sin la ayuda que necesito ¿cómo hago para salir adelante?”.
El al igual que la mayoría de los compas que egresan de la prisión se ven en el mismo problema, no solo que en las cárceles no los capacitaron sino también al egreso de ella salen como dios los mando al mundo, y nadie les da una mano.
En su afán por quebrantar estos ordenes establecido por el estado y que atraen nuevamente a la cárcel a las personas que pasaron por ella, Marcelo finaliza su: “Queremos solicitarle a cualquier organización o personas de buena voluntad que quiera darnos una mano para nuestra mejora inserción al seno social que se acerque a esta unidad donde se encuentra nuestro espacio autoestimado Rompiendo el Silencio para que juntos podamos elaborar estrategias de lucha”•